Los parados vuelven al campo, los extranjeros se van..

Los empresarios aseguran que ha habido un auténtico "aluvión" de demanda local de trabajo
La imagen en las explotaciones agrarias no tiene nada que ver con la que se definía hace unos años, cuando el campo era ejemplo de multiculturalidad. Ahora la estampa es más homogénea, con albañiles o camareros que dejaron la agricultura para buscar trabajos mejor pagados durante los años de crecimiento económico. Durante mucho tiempo, los empresarios del campo han venido denunciando las dificultades que encontraban a la hora de contratar jornaleros, dado que sus empleados aspiraban a conseguir un empleo bajo techo. Se apostó por la contratación de extranjeros en origen para dar respuesta a las necesidades que la campaña fresera impone.
Pero ahora esos españoles que abandonaron el campo hace años y fueron sustituidos por mano de obra extranjera, se ven obligados a regresar. "Ha habido un auténtico aluvión", asegura el presidente de Asaja-Huelva, José Luis García-Palacios, "aunque para esas familias que se han visto obligadas a regresar de donde se fueron la situación no es para celebrarla", apostilla. Como tampoco lo es que en el camino se haya quedado la mano de obra extranjera que hasta ahora había contribuido a sacar adelante las campañas. De hecho ya están en paro más de la mitad de los demandantes de empleo de nacionalidad extranjera, una demanda que en tan sólo un año se ha incrementado un 42,39%